Hortensias, hojas de manzano, palmeras, lluvia y flores silvestres.
"Ya no queda nada de aquellas tristes despedidas y ahora las tardes pasan entretenidas secando flores silvestres para completar el herbario. Nada falta aquí, pero se extraña tanto la otra patria. El tiempo pasa, las casas cada vez más viejas y las palmeras cada vez más altas. Eterna nostalgia, no se calma nunca, ni aquí ni allí. Añoranza profunda que se siente afrutada, como un paseo por las pomaradas, un aroma fresco de lluvia que aún cae y un corazón floral hecho de hortensias salvajes.Una esencia de otro tiempo, una historia, un escondite secreto."